Lilly y Marshall se dan cuenta de que su boda se acerca y piensan que es hora de hacer cosas de gente adulta. Por esto, invitan a casa a parejas casadas para pasar veladas tranquilas, que resultarán demasiado tranquilas.
Por su parte, Ted, Barney y Robin deciden salir por ahí y ver que se cuece por los ruidosos pubs donde es imposible comunicarse con el otro, lo que traerá más de una situación cómica.